viernes, 16 de abril de 2010

Atrapa a un ladrón



Atrapa a un ladrón es el título de una deliciosa película de Hitchcock, en la cual el gran, gran, grandísimo Cary Grant tiene que capturar a un ladrón de guante blanco en el entorno lujoso de Montecarlo. Pues en mi instituto se ha atrapado a un ladrón. Tras múltiples vicisitudes y la absoluta dejación de funciones de aquellos que tendrían que haberse preocupado de un problema que viene de largo, esto es, los robos continuados (dinero, iPods, tarjetas de bus...) en las aulas durante determinadas horas, un curso de 2Bachillerato decidió autogestionarse con respecto a este problema: después de discutir sobre si debían usar tecnologías punta para grabar al ladrón o ladrones, una alumna, Silvia, decidió meterse en el armario y esperar a que el delincuente entrase por más botín. Y la cosa funcionó: el ladronzuelo entró en la clase porque la avaricia rompe el saco, Silvia salió del armario sin ninguna connotación más que esa misma, y el chico fue pillado in fraganti.
Ahora algunas personas debían pedir perdón a algunos alumnos por haberles soltado unos tremendos rapapolvos, por haberles llamado mentirosos, o exagerados, porque estos alumnos simplemente dijeron la verdad: se robaba, y se intuía quién, y no se tomaban medidas. También debería darse alguna explicación a algún que otro profesor que lleva años denunciando estos hechos, y a quien le han contestado siempre con una gran condescendencia: pobre, no sabe lo que dice, qué exagerado es, será que quiere quedar bien con sus alumnos...
Esto se parece al caso de Galileo, cuando la Iglesia le obligó a negar la teoría heliocéntrica, ya que afirmarla le podía llevar a perder su vida o, aun peor, su trabajo. Galileo tuvo que tragar
y que decir que la tierra no se movía alrededor del sol. Pero dijo entre dientes: Eppur si muove! Sin embargo, se mueve. Eppur si roba, eso se ha estado diciendo aquí durante mucho tiempo.
Ahora, espero que se tire de la madeja y que salgan más nombres, pues estoy convencido de que no es sólo ese alumno el que robaba a sus compañeros, por cierto, teniendo un altísimo nivel adquisitivo (¿hay algo más asqueroso?). Y también espero a ver la sanción que le cae. Si le cae, claro. Vivimos en un extraño microcosmos.
Felicidades a los promotores de 2BachilleratoD. Estoy orgulloso de vosotros.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

ole ole y ole me quito el sombreo leyendo esta entrada, la verdad que el problema viene de muy atrás llevo ya casi 3 años fuera del centro y durante 6 he estudiado en ese instituto, y debo decir que en los 6 años ha pasado lo mismo y siempre se desconfiaba de quien no tenia nada que ver y se desmentía quien realmente era, en el fondo se ve cuál es el objetivo del centro para el que la calificación es lo prioritario y no la educación y dado el momento en el que vivimos considero que se debería dar algo más de educación a tanta calificación. No es más importante quien tiene sino el que no tiene nada pero con ayuda puede dar más. Dejen ya de machacar y céntrense en sacar a todos adelante.

Anónimo dijo...

Más oles. Hay que hablar claro, sin miedo y hay que reconocer lo que está sucediendo, aunque no sea agradable y coloque el instituto como una más,que lo es. No nos engañemos.
También en un aula de 1º Bachillerato se han producido robos y nadie del centro ha dado respuesta a ello.
Animo a todos aquellos que han sufrido un robo a que presenten una denuncia en la policía, ya que es la única forma, por lo que se ve, de que el centro tome medidas al respecto.
Se pueden hacer por internet...

Anónimo dijo...

REFLEXIONES SOBRE EL INSTITUTO ROSALES II


Me reconforta saber que en ese centro un docente alza la voz para cuestionar la actuación de los responsables del instituto en el tema de los robos. Sinceramente no me sorprende que se intente tapar ese tipo de cosas. Cuando nuestros hijos entran como alumnos en ese centro, nos reciben con discursos y comentarios que nos hacen sentir afortunados por poder cursar estudios en “el mejor instituto de Vigo”.Aquí no cabe la droga, las peleas, los robos ni los alumnos marginales. La formación académica es de altísimo nivel, quedando entre los primeros en selectividad y el elenco de profesores inmejorable. Ahora creo que somos victimas de una poderosa campaña de marketing probablemente los propios padres alimentamos, deseosos de sentirnos seguros ante la decisión de dejar ahí a nuestros hijos.

Con los años nos damos cuenta de que la realidad es otra. El instituto es uno más de los múltiples que hay en Vigo, con cosas mejores y peores como todos los centros, sin escapar por supuesto a la existencia de robos y el consumo de drogas. En la selectividad del curso pasado quedaron por detrás de otros centros públicos con menos fama de duros y en los métodos pedagógicos prima una enseñanza teórica basada en la memorización sin salidas rutinarias a aprender sobre el campo, sin uso rutinario de laboratorio ni practicas, cosa que si hay en otros centros, pues ya dijo séneca” lento es el enseñar por medio de la teoría, breve y eficaz por medio del ejemplo”.
Además de todo esto, en los cursos superiores, especialmente bachillerato hay un nutrido numero de profesores que están obsesionados porque sus alumnos estudien lingüística y no solo lengua española, bioquímica y no solo biología…….y un sin fin de contenidos mas que a mi entender sobrepasan con mucho los recomendados para el curso de bachillerato en cuestión.¿con que objetivo se hace todo esto?¿aumenta esto el nivel cultural, los conocimientos mas esenciales y los recursos para la vida del alumnado?¿se favorece así su sociabilidad, su flexibilidad ,su generosidad y su compañerismo? en otras palabras: Enseñar es algo mas que llenar de información para olvidar al poco tiempo. Creo que los niños necesitan menos información y más conocimientos. No deben renunciar a ser alegres, deportistas, con mentes sanas y también disciplinados.No es necesario que sepan los rasgos morfosintácticos del español subseptentrional si no van a ser filólogos ni las funciones del aluminio en el organismo si no van a ser biosanitarios.
En este curso hubo numerosos alumnos de bachillerato que han cambiado de centro y otros van a hacerlo en el próximo. Muchos alumnos están estresados y otros han perdido la confianza en si mismos, confianza que como señala Emerson, es el primer secreto del éxito. Otros perciben favoritismos y diferentes raseros para calificar a algunos de sus compañeros. En fin, yo hablo con muchos padres, madres y alumnos que se sienten a disgusto, pero el profesorado y el equipo directivo del centro ¿son conscientes de todo esto? Quiero pensar que nadie les trasmitió de manera formal, el sentir de muchos de nosotros ni se llego a tratar el tema en el consejo escolar con la importancia que se merece. Si no es así, no me puedo explicar que no duden de sus métodos, pues como dijo Goethe ”con el conocimiento se acrecientan las dudas” y todos sabemos que la duda es la llave del conocimiento. Lo más triste es sin duda que en este clima estresante, casi nos olvidamos de algunos profesores que no son mayoría, y que con su dedicación esfuerzo y generosidad, considerando la duda como algo consustancial al ser humano, hacen más llevadera esta difícil travesía para muchos niños en ese instituto. Son docentes que hacen fácil lo difícil, pero no porque se consideren llenos de sabiduría y seguridad sino porque observan y cambian, acompañan en el análisis, disfrutan sacando a todos adelante. Los alumnos dicen que tu estas en ese grupo, Miguel.

Anónimo dijo...

y más como tú deberían estar en un instituto como este, no solo como profesor, sino como persona, que al fin y al cabo,es lo que más cuenta...
todos te animamos a que siguas luchando por lo que crees y por lo que quieres.
eres un gran apoyo para estos dias que quedan de extrés y de agovios.

Gracias Miguel.