viernes, 25 de febrero de 2011

Muchísimo amor



Ando bastante perturbado con un virus que me tare a mal traer y una tos que despertaría a la Bella Durmiente, con un curso de trs horas (6 a 9) sobre nuevas tecnología aplicadas al aula, y aparte, enfrascado en una nueva novela (la otra la he plantado, por la directa) que me está ilusionando, por eso esta semana no he entrado en el blog. Pero el caso es que hace una semana llevé a mis cursos de 4 ESO discos antiguos, de vinilo e incluso de lo que los hacían antes del vinilo. Debo decir que quedaron fascinados, sobre todo por el Sargent Pepper's de 1967 que guardo como oro en paño. Ese disco dejó una huella imperecedera en mí: es recordarme a mí de pequeño, y Lucy in the sky... sonando con esa música tan enigmática, tan distinta a Los Tres Sudamericanos, Sacha Distel, Adamo y compañía. Pues otro disco que me puso la cabeza del revés a tierna edad fue el single de Led Zeppelin Whole lotta love (traducido adecuadamente en España como "Muchísimo amor"), adquisición también de Jose, mi hermano mayor. Si los Beatles me habían introducido a un mundo diferente, esta canción me abrió otras puertas, porque la música en sí, ese rock duro, era la primera vez que la oía, y el efecto final me dejó ojoplático: parecía que se acababa la canción, y de repente volvía a empezar con fuerza: muy fuerte para un niño de cinco o seis años, pero benditos sean todos estos locos por haber hecho esas cosas en aquellos años de los 60. Lo que no me convencía eran las "pintiñas" de los componenetes del grupo (la foto muestra la portada del single), de la que sólo se salvaba Jimmy Page (abajo, izquierda). Whole lotta love fue una canción decisiva en el devenir del rock duro, y sus derivaciones hacia el "metal". En el vídeo aparece la versión del Lp, más larga y pesada que la del single, pero qué se le va a hacer: pongámonos en aquellos años, ¿no? Todos estaban muy cocidos.. Y sí, la canción eterna de Led Zeppelin fue Stairway to Heaven.

5 comentarios:

Grilo do Demo dijo...

Ostras... ¿y qué se hacía antes del vinilo? ¿Esos que eran de carbón o pizarra o algo así? Algo de eso me suena... a mi clase nunca los trajiste :(

¿Sería mucho pedir que subieras unas fotos? ¿Plis? Tengo una curiosidad tremenda por ver tu sargento Pimiento y esas cosas que mencionas.

Por cierto, respecto a Joulotalof, las rayadas ruidosas nunca me hicieron gracia (ni en esa canción ni en ninguna, léase "Saucerful of secrets" y tantas otras); pero para cancionaza de Led Zeppelin, a mi ver, "Immigrant song". Qué temazo, oiga. Y la versión en directo de la BBC, ni te cuento...

miguel otero dijo...

El álbum de los Beatles no tiene nada de especial visto por fuera, más que haber sido editado en 1967. Los otros discos, son los típicos EPs de los 60 (singles de 4 canciones), y algún disco de los 40 y 50, de los de 13 y 33rpm, pero que fotografiados siguen pareciendo discos de vinilo aunque no sé de qué están hechos. Siento no haber llevado más veces discos a clase, espero que superes ese trauma, Grilo (Who are you, Devil's Cricket?), igual que yo superé que en el primer test de inteligencia de mi vida yo saliera "amorfo y nervioso". Un saludo

Grilo do Demo dijo...

Lo superaré, me llevará varias sesiones de terapia pero creo que conseguiré superarlo. ¿Se puede sacar "amorfo" en un test de inteligencia? O.O De mí no sé si te acordarás porque la última vez que me diste clase fue hace ocho años; me llamo Abel y soy alto y delgado, en aquella época creo que llevaba el pelo rapado, y estaba en clase con Enzo Garabatos, Yolanda Irawan... por decir nombres poco comunes que quizá recuerdes... soy hermano de ese que firma sus comentarios en este blog como PFF... y no sé qué más decirte. Bueno, sí: que me dejabas CDs de los Red Hot Chili Peppers.

Anónimo dijo...

Sí que me acuerdo de ti: ¿no eres el hermano de Pedro?

Grilo do Demo dijo...

El mismo, yes.