martes, 13 de octubre de 2009

Un cantar de ciego



Mi abuela Mercedes (la que sale en la foto, el día de la boda de su hija, mi tía, Mari, acompañada de su consuegro, Martín) sabía un cantar de ciego que a veces cantaba en las fiestas. El resto lo fuimos aprendiendo, pero de él sólo han quedado unos fragmentos, fragmentos que harían las delicias de un sociólogo o un etnógrafo o un antropólogo. Pongo en cursiva las palabras alteradas por el seseo, la gheada (pronunciar como jota el sonido suave de la ge), típicos de la Galicia central y occidental; las transformadas por fenómenos de aumento como la prótesis ("iarca" en vez de "arca") o parágoge ("Joaquinhe" en vez de "Joaquín"), las palabras gallegas que se le escurrieron al cantante o los
fenómenos de hipercorrección (pronunciar "guimnacia" en vez de "gimnasia", creyendo que se esán corrigiendo la gheada y el seseo). Como se verá, el cantor ciego pasaba del castellano contaminado al gallego de su zona con bastante facilidad.
El lugar de los hechos relatados es una aldea a orillas del Miño, cercana a Ribadavia, y el tiempo... posiblemente a finales o mediados del siglo XIX. Este era el comienzo;

En la villa del Rabiño
provinsia de Cortejada
vivía un matrimonio
modelo de fe cristiana
Él se llamaba Joaquinhe
su esposa se llamaba Ana
tenían los sus aforros
juardados en una iarca.

(Se ha perdido paret del corpus central, en que se presenta a la suegra de la señora Ana, y en que los bandoleros entran en la casa para robar con violencia.)

E no piso prinsipale
la criada daba jritos
sin que nadie la acodiera
nin los mismos anguelitos.
E o can que estaba na porta
e que a porta juardaba
pejáronlle un puntapé
e rompéronlle as entrañas.

(Aparentemente, después de la violencia, la suegra consigue espantar a los bandidos, y de ahí que venga la moralina final, esta vez en castellano)

Padres que tenéis hijos
hijos que váis a la escuela
no olvidéis que es necesario
tener en la casa a la suegra
porque aunque a veces os riña,
os arañe o os pegue,
también juarda mejor la casa
que una cadela (perra) de presa.

Caray con la suegra, ¿no?
Lo más interesante de esto es que retrata un fenómeno que poca gente conoce, y que yo mmo conocí por las fuentes de mi hermano Jose: el bandolerismo gallego, el cual, para no dilatarme, difería del del sur en casi todo, es decir, el bandolero gallego actuaba dentro de su parroquia o incluso del mismo pueblo (anatema para e bandolero andaluz); habitualmente eran temporeros que se quedaban sin trabajo en los meses de ocio agrícola, y que eran comandados en sus fechorías por el tabernero del pueblo. Su objetivo eran los pequeños pazos de hidalgos y las casas grandes, es decir, las casas de labradores adinerados, como parece ser el caso del romance.
En fin, un poco de socio-etnología para estos días tan Gürtel.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

es genial este blog!! creo que empecé a leerlo comenzando por las entradas antiguas donde insinuabas que esto terminaba, so relief... no ha sido así. Escribe más!! sobre libros, moscas, los pixies, encuentros fortuitos y casualidades surrealistas

Coral dijo...

Mi tía Marita cantaba otra versión de la misma copla de ciego. Ella nació en Coruña en 1911, pero sus orígenes familiares estaban en una aldea cercana a Carral, entre Coruña y Santiago, con la que siempre mantuvieron contacto. La copla, contaba ella, era la de un ciego que, año tras año, visitaba la feria de Carral. Solo recuerdo el principio, que era un poco diferente del tuyo...

"En la villa del Rabiño,
provincia de Cortegada
habitaba un matremonio
modelo de fe cristiana.
El se llama Don Xoaquín
y su esposa Doña Xuana
y juardaban los caudales
en el fondo de una jarca.

A eso de la medianoche
cuando el gallo aun no cantaba
por la puerta del xardine
los criminales entraban.

(aquí falta un pedazo, en el que es la criada quien los oye y trata de hacerles frente y grita para alertar a sus señores, ante lo que los criminales
"le metieron en la boca
dos colchones y tres almohadas")

La trincaron por los pelos,
la botan por la ventana
yendo a caer de fociños
darriba de la estercada

Y allí, entre malos olores,
la pobre, entregó su alma.

Me temo que mi memoria es más flaca que la tuya, porque no recuerdo nada más, ni de cómo seguía ni de cómo terminaba el poema...

Me ha hecho mucha gracia encontrar esta entrada y recuperar con ella un poquitín de mi infancia.

PILAR .Septiembre 2016 dijo...

La versiòn de mi madre que nació en 1925 en la provincia de Pontevedra:
En la villa de Rabiño partido de Cortejada, habetaba un matremonio modelo de fe crestiana.
El se llamaba D .Joaquin y su esposa Doña Iana y juardaban sus aforro metidos en una iarca.
A eso de la media noche, cuando el jallo no cantaba, por la puerta del gardín los creminales entranban.
Al can que estaba en la porta y que la finca juardaba, le dieron tal puntapié que le abrieron las entrañas.
En el piso principale la criada daba gritos sin que nadie la acudiera, ni los mismos angüelitos.Le metiero en la boca un colchón y una almohada, un gran
mantón de ocho puntas, un cobertor y dos mantas.La ajarraron por los pelos, la chimpan por la ven, yendo a caer de
fouciños donde estaba la estercada y allí entre malos olores la probe entrejó su ialma.
(Lo demás igual, no recordamos la forma en que la suegra los defiende.

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Unknown dijo...

Mi aportación (de parte de mi madre, provincia de Pontevedra, nacida en 1958)

En la villa de Rabiño
partido de Corteghada
habitaba un matrimonio
modelo de fe cristiana.

Él se llama D. Joaquín,
y su esposa Dña. Ana
y una casa habitaban
de la ciudad alejada.

A eso de medianoche
cuando el galo no cantaba
por la porta del jardín
los criminales entraban.

Y cogiendo a D. Joaquín
y a su esposa Dña Ana
le metieron por la boca:
un colchón, una almohada,
un cobertor de ocho puntas,
siete alfombras y ocho mantas.

Al can que estaba en la porta
y que la finca guardaba
le dieron tal puntapié
que le abrieron las entrañas.

En el piso principale
la criada daba gritos
sin que nadie la acodiera
ni los mismos angelitos.

Uno de los bandidos
la persigue y la maltrata
chimpándola por la ventana,
indo caer de fouciños
onde estaba a estercada.

Por eso os digo:
padres que tendes hijos
hijos que vais a la escola
no olvidéis que es bueno tener a la suegra en casa
que si os riñe, os pega y araña,
también os guarda la casa mejor que un perro de presa.



E cun pouquiño de gheada, inda queda mellor!

Cuco dijo...

Mi padre en Lugo, acompañado de guitarra la cantaba, sin geada claro, porque en Lugo no se habla así, pero sí trufada de "castrapo"

"En la aldea del Rabiño,
término de Cortegada,
habitaba una familia
modelo de fe cristiana.
El se llamaba don Xuaquín
y su esposa doña Xuana ...
etc..."

Hoy, 22 de diciembre de 2021, esta aldea está de actualidad por otro hecho luctuoso:
una mujer en tratamiento psiquiátrico mata y descuartiza a su novio que había venido de Barcelona a visitarla. Por las noticias de la Voz de Galicia se me vino este lugar a la cabeza y busqué en internet y encontré este blog

Manuel Posada dijo...

Creo que era una canción que cantaban los ciegos al estilo "juglar".
Yo puede escuchar a uno en la esquina de la calle de acceso a la plaza de abastos de Orense, glosando la tragedia del embalse de Ribadelago.

Anónimo dijo...

Esta trova la cantaba Joselito y contador de cuentos de aquella época, creo que era de Baiona y andaba por las ferias cantando su "romancero" como este y la llamada telefónica que le hizo un hijo que emigrou América
Pai, pai estas ahí meu pai?
- si filho estou, mais morto que vivo, pero estou
- o meu pai lle estou a falar por un mecrofano .
Un mecrobeo as dito? Tira con iso meu filho que din o doutor cos mecro es trae s malas enfermidades.
Joselito también emigró y grabó unos cuantos discos en la casa Odeón